Apenas un día después de haber puesto un récord de carreras impulsadas, el lanzador japonés dominó desde el montículo una nueva marca de abanicados en un juego.
Esta es una vista diferente de uno de los pitcheos más letales del repertorio del japonés, que se dio en el juego entre Los Angeles Angels y Milwaukee Brewers.
La superestrella de Los Angeles Angels es el nuevo rostro del béisbol al conseguir la portada del videojuego de béisbol más comprado en los últimos años.