Uno de los últimos ídolos de la organización bélica fue separado de su cargo tras dejando al equipo en el último lugar de la Zona Sur en su segundo año.
Las instalaciones de San Bartolo Coyotepec, Oaxaca recibieron a diversos scouts de Grandes Ligas que fueron en busca de los prospectos que ahí se desarrollan.
El cañonero de los Guerreros de Oaxaca se metió a los libros de historia del equipo y la Liga Mexicana de Beisbol con sus tres batazos de cuatro esquinas.