El 9 de marzo de 2006, la Selección Mexicana llegó al tercer y último juego de la primera ronda del Clásico Mundial con una marca de 1-1, por lo que se jugaba la vida frente a la novena de Canadá. Esteban Loaiza era el pitcher anunciado para abrir el encuentro donde se buscaba el pase a la siguiente etapa.
La novena tricolor había perdido 2-0 frente a los Estados Unidos en su juego de debut en el evento, y un día después venció 10-4 a la escuadra de Sudáfrica, teniendo como último rival de la ronda inicial a los canadienses.
El manager del conjunto mexicano, Francisco 'Paquín' Estrada, puso a Loaiza como su pitcher abridor, mientras que realizó algunas modificaciones en su line up, buscando mantener el buen bateo que tuvo en el duelo frente a Sudáfrica.
LINE UP MÉXICO FRENTE A CANADÁ
- Juan Castro (SS)
- Jorge Cantú (2B)
- Vinicio Castilla (3B)
- Erubiel Durazo (BD)
- Gerónimo Gil (1B)
- Luis Alfonso García (JI)
- Miguel Ojeda (C)
- Mario Valenzuela (JD)
- Luis Carlos García (JC)
MÉXICO TOMÓ LA VENTAJA DESDE EL INICIO
Esteban Loaiza subió al centro del diamante de la mejor manera que podría haberlo hecho, ya que en la parte alta de la primera entrada, la ofensiva mexicana anotó cuatro ocasiones.
La novena mexicana conectó cuatro dobletes al hilo. Erubiel Durazo, Gerónimo Gil, Luis Alfonso García y Miguel Ojeda ligaron los tubeys para poner las cosas 4-0. Entonces llegó al centro del diamante Loaiza. El derecho despachó en tres hombres ese primer capítulo.
El duelo se cargó aún más del lado mexicano en la segunda, cuando Jorge Cantú pegó home run con un compañero a bordo, para que la pizarra del Chase Field de Arizona, ya mostraba un 6-0.
En el cuarto rollo el dominio de los mexicanos aumentó. Mario Valenzuela pegó jonrón solitario y Luis Carlos García timbró el 8-0. Mientras tanto, Loaiza seguía dominando en el centro del diamante al colgar cinco ceros.
SALE LOAIZA Y MÉXICO CONCRETA EL TRIUNFO
Esteban regresó al centro del diamante en la sexta tanda, donde le anotaron la única carrera del duelo. Su actuación fue de cinco entradas, con tres hits y una anotación admitida, y un ponche. Eso le valió salir del juego ovacionado por los fans mexicanos que disfrutaban del encuentro.
Después de que México anotó por última vez en la sexta entrada, en el último tercio del juego ya no llegaron más carreras, con lo que el encuentro finalmente terminó del lado mexicano 9-1.
Este resultado le dio a México su pase a la segunda ronda del torneo, al terminar en segundo lugar del Grupo B con marca de 2-1. El otro equipo que avanzó fue el de Estados Unidos, también con récord de 2-1.
Después de eso, la Selección Mexicana viajó a Anaheim, en donde iba a jugar la segunda ronda del evento, enfrentando de nueva cuenta a los estadounidenses, además de las selecciones de Corea y Japón. Séptima Entrada
