La superestrella de los Phillies, Bryce Harper, abandonó el partido del martes por la noche contra los Braves de Atlanta en la MLB durante la primera entrada tras ser golpeado cerca del codo derecho por una recta de 95.3 mph del abridor rival Spencer Strider.
Harper sufrió una contusión y la radiografía dio negativo, informaron los Phillies.
¿Bryce Harper sufre nueva lesión?
Harper, dos veces Jugador Más Valioso de la Liga Nacional, se alejó unos pasos del home, se arrodilló y se agarró el brazo con dolor. Los preparadores físicos de los Phillies salieron a revisar a Harper, y el toletero pronto se dirigió a la casa club.
Strider fue abucheado por la afición de los Phillies cuando abandonó el montículo al final de la entrada.
Harper batea para .267 con ocho jonrones y 33 carreras impulsadas. Bateó para .323 (31-10) con tres dobles, un jonrón y siete carreras impulsadas en siete juegos en la reciente gira de los Phillies.
Bryce Harper was removed from the game after being hit by a pitch in the right elbow pic.twitter.com/mRjQUMrvQ0
— Talkin’ Baseball (@TalkinBaseball_) May 27, 2025
Edmundo Sosa entró como corredor emergente por Harper y permaneció en el juego en tercera base. Alec Bohm se trasladó a primera.
Harper batea de 16-3 (.188) en la temporada regular contra Strider. Strider hizo apenas su tercera apertura con Atlanta desde que regresó de una distensión en el tendón de la corva.
Historial de lesiones de Bryce Harper en MLB
Harper, de 32 años, se sometió a una cirugía Tommy John en el codo derecho después de la Serie Mundial de 2022 y regresó a la alineación apenas 160 días después de la intervención. Harper, en la séptima temporada de un contrato de 13 años y 330 millones de dólares, recientemente logró su carrera impulsada número 1,000 y, una vez más, jugó un papel clave en el ascenso de los Phillies a la cima de la tabla de posiciones de la MLB.
Harper se perdió 53 juegos en 2022 tras fracturarse el pulgar al ser golpeado por un lanzamiento.
Con Harper enrachado, los Phillies llegaron al juego del lunes como líderes de la División Este de la Liga Nacional con un récord de 34-19 y habían ganado nueve juegos en fila antes de perder el último de su gira contra los Athletics. Tenían previsto jugar solo dos partidos contra Atlanta antes de un partido en casa el fin de semana ante Milwaukee.