Una multitud de 11,388 personas asistió a la victoria de los Dodgers de Los Ángeles por 8-3 sobre los Rays de Tampa Bay en el primer juego de la Serie Mundial 2020 de MLB el martes por la noche, distribuidos en grupos de hasta cuatro, la mayoría en filas alternas y ninguno directamente uno detrás del otro entre los asientos verde bosque.
Esa fue la menor cantidad de espectadores de la Serie desde que 10.535 asistieron al Juego 6 en 1909 entre los Tigres y Pittsburgh en el Bennett Park de Detroit, según Elias Sports Bureau.
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— Globe Life Field (@GlobeLifeField) October 20, 2020
Major League Baseball planeó poner a disposición alrededor del 28% de la capacidad de 40,518 en el nuevo estadio de techo retráctil de los Texas Rangers. El nuevo lugar de $1.2 mil millones se inauguró este año y reemplazó al Globe Life Park, la casa al aire libre del equipo desde 1994 hasta 2019. Durante la práctica de bateo, a través de las paredes de vidrio del nuevo estadio, el sol brillaba en el ladrillo rojo del antiguo estadio al otro lado de la calle. más allá del jardín izquierdo, un campo que ahora se usa para el fútbol a nivel de escuelas secundarias.
Los juegos de la Serie Mundial suelen ser festivos, llenos desde temprano con aficionados que celebran los logros de su equipo al llegar al escenario final del béisbol y con boletos que son difíciles de encontrar, generalmente exhibidos en plástico que cuelgan de un cordón alrededor de sus cuellos.
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— MLB (@MLB) October 21, 2020
Pero esta Serie Mundial tuvo una sensación surrealista, a veces sombría, causada por la nueva pandemia de coronavirus. La pequeña multitud se complementó con el audio de los fanáticos de los altavoces del estadio.
No se permitió la entrada de aficionados a ninguno de los 898 partidos de temporada regular de esta temporada, que se jugaron en su mayoría en estadios vacíos debido a restricciones gubernamentales de salud.
