El mundo no es el mismo, la vida normal se transformó y ese es un nuevo reto para los peloteros, que ahora van a enfrentarse no solo a una temporada de 60 juegos sino a vivir con una nueva normalidad.
Y eso fue lo que Aaron Judge tuvo como principal línea al hablar con sus compañeros de los New York Yankees, una vez que estuvieron juntos para trabajar en el Summer Camp.
“Hay muchos reglamentos que dicen que no puedes que hacer esto o lo otro”, señaló Judge. “De eso fue que hablamos con el equipo: ‘Muchachos, son cuatro meses por los que tenemos que comportarnos. Cuatro meses para seguir los pasos para mantener sanos a todos. Eviten salir o visitar lugares; sean inteligentes; tenemos cuatro meses para ganar una Serie Mundial y queremos a todo el mundo en el terreno. Cuando esto termine, pueden escupir, comer semillas de girasol y salir a un restaurante”.
Judge no dudó ponerse el uniforme esta temporada, pese a que entiende que jugar durante una pandemia tiene riesgos. Luego de haber revisado el plan para completar la campaña, Judge confía en que MLB y los Yankees podrán mantener sanos a sus jugadores.
“Obviamente, todo conlleva riesgos. Hay riesgos cuando se sale a la calle o cuando uno sale del apartamento. Hay riesgos por todos lados, pero amo este juego y al equipo que tenemos aquí y la oportunidad que tenemos de jugar. Aunque son solamente 60 juegos no veo la hora de que comience”.
Judge indicó que está recuperado de la fractura en una costilla y del pulmón colapsado que le fueron diagnosticados en los entrenamientos primaverales, y que estaba haciendo swings sin molestias cuando abandonó las instalaciones de los Yankees en Tampa, Florida. El cañonero se enfocará en sumar la mayor cantidad de visitas al plato antes de que empiece la temporada regular.
Judge, quien también vio acción en los jardines el lunes en el juego interescuadras, afirma que espera estar listo cuando los Yankees inicien la temporada regular el 23 de julio contra los Nacionales en Washington. Con información de lasmayores.com
