Después de analizar la situación que se dio en el último juego de la Serie Mundial, en la Justin Turner participó en los festejos del título de los Dodgers, la oficina de Grandes Ligas decidió no aplicar castigo al pelotero.
“Los hechos básicos se conocen bien. Justin Turner fue removido del juego y se le dijo que se aislara luego de una prueba positiva por COVID-19. Después de que concluyó el partido, el Sr. Turner dejó el aislamiento y se unió a la celebración en el terreno", explicó MLB a través de un comunicado.
Después de que el jugador de los Dodgers volviera al campo de juego para estar en la celebración, personal de seguridad de las Grandes Ligas le pidieron que abandonara el lugar pero el pelotero no obedeció, situación que llevó a MLB a realizar una investigación, misma en la que concluyeron lo siguiente:
- La información no exonera a Turner de su responsabilidad pero sí encontraron las razones por las que decidió abandonar el aislamiento
- Sus compañeros lo animaron a que volviera al terreno para aparecer en la fotografía con el trofeo. Esa decisión se dio ya que la mayoría sabía que ya había estado cerca de él anteriormente
- Turner cree que recibió autorización de un empleado del club para volver al campo, aunque se considera que hubo una falta de comunicación, ya que dos empleados del club no le dijeron nada el pelotero cuando éste se dirigía al campo
Finalmente, en el comunicado MLB acepta que pudo haber manejado la situación de manera más eficaz, sobre todo considerando que el pelotero pudo haber tenido a alguna persona de seguridad que cuidara que se mantuviera en aislamiento para después ser llevado al hotel del equipo.
Ante eso, y considerando el tipo de pelotero que es y tras haber aceptado públicamente su error y haberse comprometido a poner un ejemplo positivo en el futuro, el comisionado decidió cerrar el caso sin castigar al jugador. Séptima Entrada
